Remedios caseros para la Diarrea

Una de las enfermedades estomacales que más afectan a las personas, es sin duda alguna la diarrea, todos la hemos padecido alguna vez y sabemos lo desagradable e incómoda que resulta. La diarrea es la evacuación intestinal frecuente de heces flojas y líquidas. 

Remedios caseros:

Los probióticos

El descubrimiento más reciente para frenar la diarrea son los probióticos, cuyas propiedades frenan las deposiciones gracias a que actúan como antibióticos contra la Clostridium difficile (C diff) una de las infecciones frecuentes que causa diarrea. Fuente: Baylor College of Medicine, EE.UU.

Té de manzanilla

La manzanilla es utilizada desde hace siglos por sus propiedades medicinales. Aunque las evidencias científicas acerca de su efectividad aún no son contundentes, se le atribuyen propiedades antiespasmódicas y antiinflamatorias. Puedes preparar una infusión con bolsas de té envasado, o comprar las flores y hervir. Tomar té de manzanilla varias veces al día, al menos será una forma de hidratarte.

Agua con bicarbonato

La diarrea causa la eliminación de minerales, sales y azúcares vitales para el organismo, un suero casero aportará el líquido y los electrolitos necesarios que se pierden con esta enfermedad estomacal y ayudará a evitar la deshidratación. En un recipiente con agua se agregan 2 cucharadas de sal, 2 cucharadas de bicarbonato y una cucharada de azúcar.

Agua de arroz

El agua de arroz es un clásico. Se cree que el agua de arroz calma los síntomas como el dolor estomacal y los calambres. Además, por ser rica en almidón protege tus mucosas corporales y reduce la irritación estomacal y detiene la diarrea.

Agua de limón

Se le atribuye un efecto astringente que evita la pérdida de líquidos desde el intestino y ayuda a normalizar el flujo de ácidos por el tracto digestivo. Toma el jugo de 2 limones en un litro de agua, con una pizca de sal y bicarbonato para hidratar el organismo y recuperar minerales 

Zanahorias hervidas

En 1908, el pediatra alemán Ernst Moro creó un remedio eficaz para la diarrea: la sopa de zanahoria. Provee agua para combatir la deshidratación; reabastece de sodio, potasio, fósforo, calcio, azufre y magnesio, entre otros minerales y restaura el equilibrio de la flora intestinal.

Caldo de pollo

Un rico caldo de pollo hecho por nuestra mamá o abuela, siempre es perfecto para asentar nuestro estómago. Su principal ingrediente es el agua, y por ello ayuda a mantener una correcta hidratación. Es un remedio casero muy arraigado en la cultura popular de muchos 

Ajos y azúcar morena

El ajo crudo tiene propiedades antisépticas, fungicidas, bactericidas y depurativas, debido a que contiene un compuesto llamado alicina, que actúa contra numerosos virus y bacterias. Un remedio casero popular recomienda machacar dos dientes de ajo sin la piel y añadirles dos cucharaditas de azúcar morena. Hervirlos en 3/4 de taza de agua y beberlo dos o tres veces al día.

Plátanos o bananas

Además de ser una de las frutas más consumidas en el mundo entero, el plátano es una fruta rica en vitaminas C y B6 y minerales esenciales. El potasio presente en el plátano tiene la capacidad de restablecer los electrolitos que se pierden durante la diarrea. Comer plátanos maduros puede ayudar a endurecer las heces y reponer el agua perdida.

Manzana

La sabiduría popular atribuye a la manzana propiedades curativas para aliviar la diarrea. La pectina, una fibra soluble presente en la manzana actúa como una esponja capaz de absorber y eliminar las tóxinas producidas por las bacterias causantes de problemas estomacales y ayuda a endurecer las heces acuosas.

Cáscara de naranja

Es uno de los remedios caseros más populares para la diarrea. Tiene más fitonutrientes y flavonoides que la pulpa interna, lo que le confiere propiedades antiinflamatorias que pueden ayudar a la digestión y aliviar problemas intestinales como acidez, ardor de estómago, flatulencias y diarrea. Hervir la cáscara por 5 minutos, enfriar y agregar miel a gusto.

Si existen signos de deshidratación: lengua seca, mareos al ponerse de pié, disminución de la cantidad de orina, decaimiento importante. Si las deposiciones se acompañan de sangre, pus o mucosidades. Cuando la diarrea se acompaña de vómitos que impiden la ingesta adecuada de líquidos, o si la diarrea persiste por más de 2 semanas

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